Miguel Galuccio fue desplazado como presidente de YPF debido a las diferencias irreconciliables con el Poder Ejecutivo. El empresario llegó a su cargo en mayo de 2012, cuando se nacionalizó la petrolera.

Galuccio mantiene disputas con el gobierno de Mauricio Macri respecto a las políticas de la compañía, en especial, con el ministro de Energía, Juan José Aranguren, quien nunca vio con beneplácito la gestión del petrolero, incluso desde la época en que el ministro era CEO de la competidora Shell Argentina.

El entrerriano, además, presionó para que el próximo titular de YPF sea un directivo de la gestión actual para conseguir una continuidad en la línea de la compañía.

Según supo El Destape, fue el Gobierno quien ayer le pidió al presidente de YPF que renuncie a su cargo en la petrolera a partir de abril, "debido a cambios en la estructura" de la compañía que el oficialismo tiene previsto para el mes próximo.

Se le pidió a Galuccio -quien está en el cargo desde el 2012- "que se vaya en abril para que sea una transición ordenada".

"Es un profesional y sirve", había dicho Mauricio Macri sobre el CEO de YPF, Miguel Galuccio, en la previa de la elección presidencial.
"La antítesis del modelo improvisado de Aerolíneas Argentinas", aseguró el mandatario una vez que fue elegido por el 51% del electorado. Tres meses después, Galuccio fue desplazado debido a las diferencias irreconciliables con el Poder Ejecutivo.

"Galuccio es un tipo del gremio, que sabe", remarcó Macri allá por julio del año pasado, cuando ni habían pasado las Primarias Abiertas, Simultáneas (PASO). "Yo dije que no lo descalifico de movida, porque es un hombre que conoce. No es un hombre que recién se inicia en la materia como Recalde", agregó.

El pedido de renuncia sería "debido a cambios en la estructura" de la compañía que el oficialismo tiene previsto para el mes próximo. Entre los nombres que se barajan para reemplazarlo, estarían dos posibles CEOs de dos empresas petroleras privadas.